Los primeros momentos son importantes; las primeras palabras, los primeros pasos, las primeras impresiones, la primera vez que pedaleas tan velozmente que te lleva a un título de la serie mundial de triatlón de la ITU. Nadie puede comprenderlo mejor que los cuatro triatletas que lo lograron por primera vez este año.

Erin Densham (AUS) inició la tendencia en Sídney. A pesar de un currículum impresionante, Densham nunca había ganado un evento de la serie mundial de triatlón. En su haber, contaba con un título mundial juvenil, un título continental oceánico, un Juego Olímpico, pero el triunfo en la serie no llegaba. Sin embargo, tras postear el mejor tiempo en la Copa Mundial Mooloolaba 2012, Densham se llenó de confianza para ir por todo.

Densham puso en práctica un plan casi perfecto en Sídney: se mantuvo junto a las líderes en el segmento de natación, se ubicó primera en el de ciclismo y luego se quedó con la etapa pedestre. Al llegar a los tres kilómetros finales, Densham solo sentía la presión de Andrea Hewitt (NZL) y Helen Jenkins (GBR). La australiana hizo su jugada en los últimos minutos y se aseguró el oro con nueve segundos de ventaja.

Steffen Justus (ALE) comenzó la racha ganadora muy rápidamente. Como Densham, Justus había estado a punto de triunfar una carrera de la serie mundial en numerosas oportunidades. En 2009, había sido segundo en el evento Dextro Energy de Londres, y cuarto en Hamburgo.

El año próximo, Justus llegó tercero en la Gran Final de la serie de campeonatos mundiales de triatlón Dextro Energy, augurando un auspicioso año 2011. Sin embargo, la temporada fue cansadora para Justus, cuyo mejor resultado fue un quinto lugar.

Pero todo cambió en Australia. Luego de una sólida etapa de natación y de ciclismo, Justus, Richard Murray (RSA) y Laurent Vidal (FRA) trabajaron al unísono para superar a Ivan Vasiliev (RUS) y James Elvery (NZL) en el trote. Hasta los últimos 15 minutos, no podíamos sospechar quién se quedaría con la carrera, en ese momento Justus cargó y se adjudicó su mayor triunfo ITU hasta la fecha.

Richard Murray pasó del duatlón al triatlón, y este año se convirtió en el primer africano en llegar al podio de la serie mundial de ITU, y lo hizo en Sídney con una medalla de plata. En San Diego volvió a hacer uso de su increíble energía pedestre y llegó tercero.

Dado el poder de sus piernas en las dos carreras, Murray comprendió que podría con la distancia sprint de Hamburgo- y no se equivocó. Al desmontar su bicicleta, Murray impuso un ritmo feroz que Justus y Javier Gomez (ESP) intentaron igualar. Pero Murray fue demasiado veloz, y así obtuvo su primera victoria ITU.

Anne Haug tuvo que aguardar más que su compañero alemán para adjudicarse un primer triunfo de la serie ITU. Pero la espera valió la pena, ya que Haug incrementó su eficacia carrera tras carrera.

En Mooloolaba fue décimo primera, En Sídney y San Diego fue séptima, en Madrid, Hamburgo y Estocolmo llegó cuarta. Pero en Yokohama, Haug desafió a la medallista de la plata olímpica Lisa Norden (SUE), aunque fue superada en la recta final. En Auckland llegaría su momento.

En la última carrera de la temporada, Haug atacó el duro circuito de ciclismo y se ubicó en el grupo en el que veíamos a Norden, H ewitt, Barbara Riveros Diaz (CHI), y Sarah Groff (USA) a quienes superó para quedarse con el título.